| Localización | espadaña segunda |
|---|---|
| Diámetro (en cm) | 50 |
| Peso aproximado (en kilos) | 72 |
| Año fundición | 1789 |
| Descripción |
En la toma de datos de agosto de 2005 la campana no pudo documentarse, puesto que estaba oculta entre nidos de cigüeña. Estos fueron los causantes últimos, en una madrugada del septiembre de aquel año, de un incendio en la espadaña, que redujo los nidos a cenizas. Aún sin ellos, el precario estado de conservación de los accesos impide cualquier intento por documentar la campana, que se nos revela como un bronce barroco de gran belleza. A pie de espadaña a penas se entrevé, en el tercio, el año de su fundición, "[AN]O DE▲MDCCLXXIX", inscrito en una bellísima capital humanística ricamente decorada, con crucecillas, custodias, espigas, motivos zoomórficos, pequeños caracteres y algún cráneo, seguramente tomado de las "vanitas" barrocas. Por su parte, en el área central, la campana cuenta con dos complejas cruces sobre pedestal enfrentadas, que buscan -como los rituales de protección de los eclesiásticos- la protección de los distintos puntos cardinales. Las características de estos elementos permiten atribuir la campana al mismo autor anónimo que, este mismo año, fundió el timbre de los cuartos del reloj interior de la catedral. |
| tercio (T) |
(2 cordones) "(...) [AN]O DE▲MDCCLXXIX" (2 cordones) |
| Medio (M) |
(00) (cruz sobre pedestal radiante) (06) (cruz sobre pedestal con los tres clavos) |
| Medio pie (MP) | (5 cordones) |
| Toques tradicionales de campanas | Tocó, día y noche, los cuatro cuartos del reloj, por acción de la maquinaria horaria, situada algunos metros más abajo. |
| Toques actuales de campanas | En desuso desde su desconexión del último reloj. Una maquinaria industrial ahora expuesta en el museo. |
| Yugo | Biga de madera. |
| Estado actual | El conjunto se encuentra en un estado muy precario, que podría comprometer a medio plazo la estabilidad de la campana. El incendio que padeció la espadaña del reloj, además de ennegrecer el bronce, consumió parcialmente la biga de madera que suspende la campana. Ahora, si la campana se sostiene es, en buena medida, gracias al eje pasante con el que cuenta. |
| Mecanismos de toque | Mazo por gravedad. |
| Propuestas | Para poner de nuevo en funcionamiento la campana habría que sustituir, necesariamente, la biga de madera antigua por otra nueva de la misma volumetría. En la medida en que su conservación lo permita, cabría valorar la reintegración en el nuevo yugo del antiguo eje pasante de forja. Por otro lado, es recomendable mecanizar la campana con un motor que tire de su mazo original, como antaño lo hizo el reloj. La instalación de electromazos no es ni adecuada desde la óptica patrimonial, ni logísticamente aconsejable, puesto que dificultaría las labores de mantenimiento del conjunto. Todo ello sin menoscabar los derechos de las aves protegidas que anidan en el entorno de la campana. |
| Valoración | Debe ser incoado expediente para incluirla en el Inventario General de Bienes Muebles. En caso de rotura sólo puede ser soldada. Puede remplazarse por otra campana de distinta afinación. |
| Instalación | La instalación es tradicional y debe ser conservada para proteger la sonoridad y otros valores culturales. Cualquier mecanización deberá conservar estas cualidades, reproducir los toques tradicionales y permitir los toques manuales. |
| Notas | Medidas aproximadas, dada la inaccesibilidad de la campana. |
Autores de la documentación
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| Editor de la ficha | SARRIÓ ANDRÉS, Pau |
| Actualización | 26-05-2021 |
| 4 Fotos | |
