Tanto repicó el día de la patrona que se quebró. Una de las campanas de la iglesia parroquial de Ortigueira rompió el 29 de julio (día de Santa Marta) del 2005 mientras anunciaba a bombo y platillo la jornada festiva y tras 75 años haciendo sonar su badajo.
Entonces, una comisión integrada por tres vecinos tomó la iniciativa de reponer el instrumento y encargó una nueva, que desde ayer está colocada ya en el campanario de Santa Marta, lista para volver a repicar el próximo día 29.
Se trata de una campana de bronce de 1.035 kilos de peso, construida por la fundición Sucesores de Ocampo, de Caldas de Reis (Pontevedra). «Ya la he oído tocar y emite un sonido suave, maravilloso», detallaba ayer el párroco José Buide, quien explicaba también que ya había bendecido la campana. Está dedicada a Santo Domingo, San Martín y a Santa María Magdalena.
Jacobo Castro, quien junto a Ramón Barro y Luis Diéguez integra la comisión vecinal, explicó que la campana es una de las más grandes de la Diócesis y que ha costado en torno a 13.000 euros.
La parroquia ha aprovechado la renovación del instrumento para efectuar otras mejoras que en total suman casi 20.000 euros de inversión, que se pagarán con donaciones particulares y de la propia parroquia. Entras las mejoras introducidas en el campanario se encuentra la instalación de un equipo para programar los repiques de las campanas, y rejas para que no entren las palomas.
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