Foto de LA PRENSA / Mauricio Bolaños
La feligresía católica de San Pedro Nonualco vivió momentos de júbilo, al ver regresar a su sitio original las campanas de bronce, las cuales quitaron debido a que los terremotos de 2001 dañaron la estructura antigua de la iglesia. Como medida de prevención luego de los sismos, fueron bajadas de la torre en donde se encontraban instaladas.
Cientos de feligreses católicos se congregaron recientemente frente al templo y fueron testigos del acontecimiento. Gracias a una maquinaria especial, las campanas fueron subidas y colocadas en su antiguo lugar, ahora ya reconstruido. El párroco Pedro Celestino Palacios contó que las campanas fueron traídas desde Veneto, Italia, en 1951, gracias al dinamismo del recordado mártir y religioso italiano Cossme Spessoto y la feligresía católica.
En la actualidad, el templo, que ha sido considerado monumento histórico nacional, está siendoreconstruido. El párroco Palacios manifestó que, según documentos históricos, el templo data del año 1874. En ese año se colocó la primera piedra, y 17 años más tarde concluyó la construcción. La estructura se mantuvo intacta por más de 134 años, hasta que los terremotos de 2001 casi la derrumban.
Actualmente todavía se trabaja en su restauración, que tendrá un valor de casi $1 millón. Al momento, se está trabajando en la primera etapa del proyecto, que incluye la reconstrucción de la fachada principal de la iglesia. Se espera que sea finalizada en diciembre próximo. Palacios señaló que toda la obra de reconstrucción del templo está siendo posible gracias al aporte de los miembros de la Asociación de Desarrollo Comunal de San Pedro Nonualco (ADESCOPEN), la feligresía católica y de muchos sampedranos residentes en el extranjero.
Una grúa especial fue utilizada para la subida y colocación de las campanas en la torre del templo que fueron reubicadas, luego de que los terremotos del 2001, dañaron su sitial. Un grupo de hombres colaboró en la colocación final de las 4 campanas que volvieron a sonar y llamar a la feligresía a la misa en acción de gracias por su retorno a su lugar de origen. El párroco de San Pedro Nonualco, Celestino Palacios, el religioso italiano Maximiliano Martini y el Vicario de la Diócesis de Zacatecoluca, monseñor Jesús Antonio Carpio, junto al pueblo católicos observaron atentos a la colocación de las campanas.
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