Se derrumba la Torre del Campanario de Cervera del Llano - Autor: comunic@vox
La localidad de Cervera del Llano se despertó ayer sobresaltada ya que la torre del campanario de la Iglesia de San Pedro Apóstol se derrumbó en la madrugada del domingo al lunes y afortunadamente no hay que lamentar daños personales aunque sí cuantiosos daños materiales. Hace un par de meses las grietas en la base de esa zona del templo preocuparon a las autoridades ya que se desprendieron unas piedras de gran tamaño. Ante las consecuencias que podría tener para los fieles que acudían a misa pues se decidió cerrarla en los primeros días del pasado mes de abril. Se trasladaron algunas imágenes que había dentro de la Iglesia y sólo se dejaron aquellas que procesionaban durante la Semana Santa pero en la mañana del lunes el párroco de la localidad, Miguel Ángel Villalba junto con otras personas del pueblo se afanaban en sacar cuanto antes los enseres que quedaban sobre todo en la Sacristía.
La Iglesia de San Pedro tenía pendiente unas reformas que en un primer momento iban a ejecutarse después de Semana Santa pero de momento nadie se había acercado por allí y ahora los cervereños esperan que lo que ha ocurrido sirva para adelantar los trabajos que tienen pensado hacerse. En diciembre del año 2010 la consejera de Educación, Ciencia y Cultura, María Ángeles García, firmó el convenio para la restauración de la Iglesia parroquial de San Pedro Apóstol, en Cervera del Llano, a través de la Comisión Mixta Iglesia Católica- Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Fruto de la colaboración que el Gobierno de Castilla-La Mancha y la Iglesia Católica mantienen para la recuperación del patrimonio histórico de titularidad eclesiástica, el Ejecutivo autonómico estaba llevando a cabo ese año la restauración de cinco iglesias de la provincia. Así, a las inversiones directas por parte del Gobierno regional en los templos de Alcohujate, Buenache de Alarcón y La Sey, en Valeria, se suman los convenios para la restauración de la Iglesia Parroquial de Ledaña y de San Pedro Apóstol, en Cervera del Llano.
En este sentido, la consejera de Educación, Ciencia y Cultura, María Ángeles García, firmó también con el párroco de Cervera del Llano, Miguel Ángel Villalba, el convenio de colaboración para acometer la restauración de este templo, declarado Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento en 2007.
En concreto, las obras que se iban a realizar cuentan con un presupuesto de 304.403,94 euros, cantidad que será financiada al 70% por el Gobierno de Castilla-La Mancha y el 30% restante lo aportará el Obispado de Cuenca. Las actuaciones previstas consisten en el levantado del pavimento exterior y aceras de la calle para realizar los trabajos de recalce del templo según el estudio geotécnico del terreno que se ha realizado. Esto también se llevará a cabo en el interior, con el fin de solucionar las humedades, para lo que se construirán cámaras bufas ventiladas. La urbanización del exterior consistirá en la reconstrucción de las aceras y pavimentos levantados con motivo de los recalces.
La Iglesia de San Pedro posee unos orígenes románicos, quedando sólo de este estilo la portada con arco apuntado y está totalmente transformada ya que se amplió en el siglo XVII. Tiene una sola nave, con cabecera de planta cuadrada y cuatro contrafuertes, uno en cada esquina. En el muro norte se sitúa un cuerpo adosado de capilla, y a los pies se halla la torre campanario. De la iglesia original se conservan la planta y los paramentos de la nave, así como la portada en el muro meridional. La última reforma debió de efectuarse en el siglo XVII, afectando igualmente a todo el interior de la construcción.
En el muro sur se sitúa la portada románica de ingreso al templo, que es de arco apuntado, con jambas y dovelas de sillares con dos columnas a cada lado y capiteles de penca formando grumos en los ángulos que sostienen una imposta plana.Con esas obras desapareció la antigua cabecera así como el muro de los pies en la reforma barroca que se hizo en aquel siglo y que afectó prácticamente a todo el interior del edificio. Para sustituir el ábside se levantó un gran presbiterio de planta cuadrada y la amplia nave medieval sufrió una elevación considerable, usando como asiento del recrecido muro los sillares de la cornisa antigua, colocados en posición invertida; han desaparecido los canecillos en los que aquella se apoyaba para adquirir su habitual vuelo. Sobre el muro sur, se conservan todavía las ménsulas que se usaron originalmente para tender un pórtico de madera, que tiene el mismo perfil que las iglesias de las localidades de Hortizuela y Alcocer. La portada sur del templo es la única conservada aunque es probable que frente a ella hubiese otra pues el espacio simétrico que ocupa, en el muro frontero, lugar en donde debería haber estado la anterior es hoy puerta de una capilla contemporánea de la reforma.
Se encuentra esta portada situada sobre un cuerpo saliente del muro en que se abren los dos arcos que la forman, apoyados sobre columnas rematadas en capiteles. La escasa consistencia de la arenisca en la que se labró la portada y las inclemencias meteorológicas han perjudicado considerablemente a las molduras y capiteles pero hace no mucho tiempo podían verse las estilizadas formas vegetales, brevemente realzadas y rematadas en bolas.
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