Justo Cuberos, prior de los Dominicos, junto a dos de las cuatro campanas que volverán al Santuario. - Autor: ANDÚJAR, Francisco
Mañana se procederá a su bendición y el viernes se colocarán en el campanario del templo
ras varios meses de ausencia, las campanas del Santuario de la Virgen del Mar regresarán a su lugar original esta semana, tras haber sido sometidas a un proceso de restauración que ha llevado a cabo una empresa murciana. Las piezas, que ya están en el templo, serán bendecidas mañana a las 20 horas y a primera hora del viernes se colocarán en el campanario de la Patrona.
“La campana mayor se encontraba rajada y por tanto era necesaria su refundición, ya que la grieta amenazaba quebrarla y romperla, con el consiguiente riesgo que conlleva”, cuenta a LA VOZ el padre Justo Cuberos, prior de los dominicos.
El diagnóstico inicial arrojó que existían “deficiencias estructurales en los yugos metálicos” que desplazaron el centro de gravedad, “en los anclajes y rodamientos” y por tanto se aconsejó cambiarlos por otros nuevos de mayor resistencia.
La empresa encargada del proceso ha realizado la refundición y restauración de la campana mayor, los nuevos yugos de madera, “respetando las tradiciones de la zona” y los nuevos badajos, “provistos de los necesarios elementos de seguridad”. Además, han procedido a la limpieza y posterior pulido de las campanas, a la instalación de placas de anclaje con rodamientos al aire, a la colocación de un sistema de volteo controlado por impulsos y a la instalación de un repique electrónico.
Además de las tres campanas restauradas se ha encargado una cuarta, ya que existía un espacio para la misma en el campanario, aunque se desconoce cuál fue el destino de la pieza original. También se colocará la cruz de hierro de Santo Domingo, de tres metros, en la cúpula de la torre.
Campanas con historia
Las cuatro piezas de bronce que desde el viernes volverán al campanario de la Patrona tienen su propio nombre e historia. La de mayor tamaño se llama Santa María del Buen Consejo, pesa 217 kilogramos y estará en el lado oeste de la torre. “Es la campana más grande, se encontraba rajada por el labio y por ello se ha procedió a su restauración. En el proceso de soldadura se determinó que sería conveniente su refundición, ya que está fechada en 1952 y no es una campana de alta calidad ni de valor histórico”, explica.
La campana Santa María del Mar tiene un peso de 145 kilogramos, está ubicada en el sur y lleva grabada la leyenda: “En honor de Santa María del Mar, patrona de la ciudad de Almería”.
La tercera pieza es la de nueva creación, estará en el lado este del campanario y llevará el nombre de Santo Domingo, de 42 kilos.
Por último, también con 42 kilos, la campana llamada San José se ubicará en el lado norte de la torre del Santuario de la Patrona.
El padre Justo Cuberos se muestra muy feliz por el regreso de las campanas al templo. “Ahora hay que bendecirlas, colocarlas y pagarlas. La comunidad de los Padres Dominicos ha hecho la primera aportación; ahora esperamos la colaboración de los fieles”, cuenta. A tal efecto, se habilitará una cuenta en Unicaja.
La intención del prior de los Dominicos es que las campanas vuelvan a sonar en Navidad. Su regreso al templo coincide en el tiempo con el primer aniversario del fallecimiento de Fray Manuel Villarreal, quien dedicó buena parte de su vida al cuidado del Santuario de la Virgen del Mar y era una figura muy querida por los almerienses.
“El tañer de las campanas es, de alguna manera, la expresión de los sentimientos del pueblo de Dios: cuando este pueblo exulta o llora, da gracias o suplica, se congrega y pone de manifiesto el misterio de su unidad en Cristo”, cuenta el sacerdote acerca de la costumbre de convocar al pueblo cristiano para la asamblea litúrgica y los principales acontecimientos de la comunidad a través del sonido de estos instrumentos.
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