| La primavera se ha anticipado algunas horas y ofreció ayer uno de los días más luminosos del año para que el pueblo de Sant Josep pudiese celebrar la festividad de su patrón con todo su esplendor. La fiesta popular congregó en la población a cientos de personas, muchas de ellas llegadas desde otros lugares de la isla. Por la mañana, el obispo Agustín Cortés presidió la misa en honor del patrón y elogió en su homilía la figura de San José como "ejemplo de fidelidad y estabilidad familiar". Posteriormente hubo procesión y ball pagès. El programa festivo continuó por la noche con diversas actuaciones, entre ellas la del acordeonista Kepa Junquera, que clausuró la jornada. |
La primavera ha madrugado este año y ofreció ayer uno de los días más luminosos del año para que el pueblo de Sant Josep pudiese celebrar la festividad de su patrón con todo su esplendor. Desde primeras horas de la mañana comenzaron a llegar una multitud de visitantes, que no quisieron perderse una fiesta. A las once en punto de la mañana comenzó la misa solemne, que ofició el obispo de Eivissa, Agustín Cortés Soriano. Durante su homilía, el prelado elogió la figura del padre de familia que encarna San José. “En estos tiempos en que la familia vive una profunda crisis, San José ofrece un gran ejemplo de fidelidad y estabilidad familiar”, señaló.
Al acto asistió la presidenta del Consell Insular, Pilar Costa, y los consellers de Cultura, Fanny Tur, y de Turismo, Josep Marí Ribas, Agustinet, así como la corporación municipal en pleno, presidida por el alcalde, José Serra Escandell. También acudieron el senador Enrique Fajarnés Ribas, la directora insular de la Administración general del Estado, Marienna Sánchez Jáuregui; el alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tur, y su hermano, el también conseller Joan Marí Tur.
Tras el oficio religioso, los fieles tomaron parte en la tradicional procesión, en la que desfilaron San Roque, San Vicente, el Corazón de JesÚs, las vírgenes del Carmen, de Fátima y del Rosario, San Francisco, Santa Teresita del Niño JesÚs, la Inmaculada Concepción, San Juan Bautista y el anfitrión de la jornada, San José, que cerraba la comitiva religiosa, durante la que sonaron las vigorosamente las campanas del templo. A la salida de la procesión, soltaron numerosos globos de colores que decoraron por unos minutos el limpio cielo de la soleada mañana.
Posteriormente, Sa Colla de Sant Josep ofreció a los asistentes una exhibición de danzas tradicionales de las Pitiüses. Mientras, los políticos olvidaron por unos minutos sus difetencias y departieron cordialmente al tiempo que degustaban las sabrosas orelletes que repartía un grupo de voluntarios en el salón parroquial, donde se hallan expuestas las fotografías que Vicent Ribas, Trull, ha realizado en sus Últimos viajes y también de algunos personajes de Sant Josep. La muestra fue muy elogiada por los asistentes. La mañana culminó con un aperitivo a la entrada del Ayuntamiento, que contó asimismo con una masiva concurrencia.
La jornada debía culminar con las actuaciones del humorista Agustín el Casta y Lorenso Llamas. El acordeonista vasco Kepa Junnkera cerraba el cartel artístico
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