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© Diario de Burgos (2010) © Campaners de la Catedral de València (2024) campaners@hotmail.com Actualización: 24-04-2024 |
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Repasamos esta semana las cuatro iglesias románicas situadas más al norte de la provincia burgalesa • Se conservan, sobre todo, los arcos de acceso y los campanarios
Los cuatro templos que abordamos en este reportaje son los situados más al norte de la provincia de Burgos, en la zona cercana al pantano del Ebro. Las iglesias de Santa Gadea del Alfoz y Herbosa están todavía pendientes de la redacción del proyecto de restauración, al contrario que las de Villasbáscones de Bezana y San Vicente de Villamezán.
Esta última, la iglesia de San Vicente Mártir, fue restaurada en 2006 dentro del Plan de Intervención del Románico Norte que lleva a cabo la Fundación Santa María La Real. Se trata de una construcción típica del modelo de edificios populares destinados al culto de un concejo y, a pesar de las reformas y las ampliaciones llevadas a cabo tras la Edad Media, aún conserva sus trazas originales del siglo XIII (tal y como se aprecia observando su bóveda de cañón apuntada).
Con una cabecera compuesta por ábside semicircular, dos naves y espadaña, el templo se completa con la sacristía y el pórtico. La portada de acceso solo conserva de la primitiva románica una arquivolta decorada y en el interior destaca un arco triunfal apuntado y doblado que descansa en una pareja de capiteles con cuatro parejas de leones.
En cuanto a la rehabilitación, se ha intervenido fundamentalmente en la torre campanario (que presentaba una serie de grietas y desplomes), se ha sustituido la cubierta y se ha restaurado la escalera. En la propia iglesia se ha reparado igualmente la cubierta y se han limpiado las fachadas, y del interior se ha recuperado el coro y se ha renovado la instalación eléctrica.
El retablo de estilo clasicista presentaba un deficiente estado de conservación tanto en la decoración exterior como en la estructura de madera: ataque de xilófagos, polvo, abrasiones y elementos desencajados eran sus principales males. La intervención también ha consistido en arreglar esos "desperfectos".
Cascadas de las Pisas
La otra iglesia remodelada es la de Santa Águeda, en la localidad de Villabáscones de Bezana. El templo presenta cabecera cuadrada de bóveda estrellada, con sacristía, dos naves y campanario. Bajo la espadaña se abre una puerta que da acceso a un pequeño pórtico con portada románica, prácticamente el único elemento del estilo que posee la iglesia. Consta de un arco de medio punto al que rodean tres arquivoltas que descansan en unos capiteles cuya decoración no es de las mejores.
El principal problema que presentaba el edificio es su cercanía con el río de la Gándara, ya que el templo se levanta sobre la pendiente de la garganta y eso hace que se impregne de la humedad que ofrecen las cascadas de Las Pisas.
La intervención, por tanto, debía atajar esa circunstancia, sobre todo en los elementos más débiles. Por eso se sustituyó la estructura de madera, conservándose las cerchas originales, y los pilares de ese mismo material de la nave lateral, que se sustituyó por un murete armado. También se retejó y se introdujo una lámina de impermeabilización.
Respecto a sus bienes muebles, se intervino en el retablo del siglo XVI, una pieza compuesta por cuatro grandes altorrelieves y una escultura exenta con la representación de la imagen titular, Santa Águeda.
Herbosa y Santa Gadea
Nos queda aún por relatar las características de los dos templos de este cuarteto en los que todavía no se ha intervenido. Una es la antigua iglesia de Santiago y actual ermita de San Valentín, en Herbosa.
Es una construcción de finales del siglo XII profundamente reformada en los siglos posteriores y que solo conserva de esa primera época el muro sur y su portada. La puerta de acceso consta de un arco de medio punto rodeado de un guardapolvos y tres arquivoltas.
Como en las dos iglesias ya mencionadas, en este caso la espadaña o campanario también es románica, taladrada por dos grandes vanos para las campanas y con un remate muy agudo. Su grave estado de conservación requiere una intervención importante.
Por último nos detenemos en la iglesia de la localidad de Santa Gadea de Alfoz, también pendiente de su recuperación. Como se aprecia en la imagen, es un edificio sencillo, de finales del siglo XII. De su construcción podemos destacar sus grandes sillares de piedra caliza.
En su origen la cabecera estaba cubierta con una bóveda de cañón, pero la parte superior se hundió y fue sustituida por un entramado de madera que es el que actualmente conserva.
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