Hay cosas creadas por el hombre que nunca se pueden desprender de su carácter efímero y otras que están destinadas a permanecer. El valor perenne de éstas últimas lo podemos atribuir a sus virtudes propias, pero de poco serviría hablar de ellas si no buscamos razones más profundas.
Lo importante en realidad no es sólo el resultado final, sino también la necesidad que empuja al hombre a crear cosas bellas.Cuando hablamos de las campanas, esa idea abstracta de la belleza, cobra vida en la compleja sobriedad de sus formas y en la pureza de sus sonidos.
Obtener del bronce fundido tales cualidades es un privilegio reservado a los grandes artesanos, sin embargo, el poder de permanencia que poseen las campanas en la memoria colectiva es un misterio que sólo a ellas pertenece.
Han transcurrido ya muchos años desde que el 3 de Septiembre de 1881, Don Vicente Rosas Soler decidió establecer en Torredonjimeno esta fundición de campanas.
Sin embargo, la larga tradición que hemos ido acumulando en este noble oficio se remonta a más de 300 años de antigüedad.
Desde entonces hasta ahora, el proceso de fabricación de nuestras campanas apenas se ha modificado con respecto a las técnicas utilizadas en las primeras fundiciones que surgieron en Europa.
En la funcición de campanas "HIJO DE MANUEL ROSAS SERRANO" hemos mantenido todo aquello que hace de nuestras obras, auténticas "Esculturas Musicales".
Conocimiento, arte y tradición se aunan en la dilatada experiencia de esta fundición para dar fruto a unas campanas de características verdaderamente únicas.
La selección de materiales, las proporciones de la aleación, la forma del molde y todos lo pasos que se dan en la fundición o refundición de una campana son controlados por el maestro fundidor. Sólo con su meticulosa labor se puede obtener todo el refinamiento que es propio de cada campana.
La fabricación de campanas en la fundición "Hijo de Manuel Rosas Serrano", es un proceso completamente artesanal.
Las campanas se hacen por encargo, ya que el peso o el tamaño es cuestión del cliente y del lugar donde irán ubicadas. En el cuadro siguiente se muestra el peso que corresponde a cada campana según su diámetro.
Diámetro | Peso | Diámetro | Peso | Diámetro | Peso |
30 | 18 | 65 | 160 | 110 | 750 |
35 | 25 | 70 | 200 | 115 | 875 |
38 | 33 | 75 | 230 | 120 | 1.000 |
42 | 40 | 80 | 290 | 125 | 1.150 |
45 | 47 | 85 | 340 | 130 | 1.300 |
48 | 60 | 90 | 430 | 135 | 1.450 |
52 | 76 | 95 | 500 | 140 | 1.600 |
56 | 94 | 100 | 550 | 145 | 1.775 |
60 | 120 | 105 | 650 | 150 | 2.000 |
D. Vicente Rosas Soler firmaba sus campanas con un distintivo muy peculiar: la silueta de una lagartija. Aunque esta curiosa inscripción no tuvo continuidad en la extensa vida de esta empresa, actualmente se ha recuperado como seña de identidad de nuestra fundición.
© Fundición Campanas Hijo de Manuel Rosas Serrano (2000) © Campaners de la Catedral de València (2024) campaners@hotmail.com Actualización: 23-04-2024 |