Foto Vicent MARTÍ - EL MAYOR DE EUROPA. El carillón de San Pascual tiene 72 campanas, cuando lo habitual son 20.
El carillón de la basílica de San Pascual, que hasta ahora sonaba cada hora desde las nueve de la mañana hasta las nueve de la noche, ha dejado de funcionar coincidiendo con las tensiones entre la Junta de Economía y Obras del templo de San Pascual y el empresario José Gómez Mata, que sufragó el carillón. Los vecinos del recinto religioso no han podido evitar los comentarios al dejar de oír el sonido al que estaban acostumbrados proveniente de la basílica.
SegÚn las religiosas clarisas de la basílica de San Pascual, el carillón no suena porque está pendiente de ser revisado y «como no han venido aÚn, es mejor prevenir que lamentar daños».
Otras fuentes, sin embargo, relacionan el hecho con el empresario Gómez Mata. El mantenimiento del carillón está a cargo de la empresa Chumillas y Tarongi de Vila-real -que ha tenido una especial relación con el empresario Gómez Mata-, y sólo a un técnico de esa firma se le impartieron los conocimientos necesarios para el mantenimiento del carillón.
Levante de Castelló ha intentado ponerse en contacto con el empresario Gómez Mata, que nunca ha tenido problemas para facilitar información a los periodistas, aunque ahora se ha rodeado de un equipo que impide cualquier intento de hablar con él.
La mala relación entre la junta de Obras y el empresario es manifiesta. Gómez Mata cedió un cuadro del patrono de la ciudad a la basílica que sólo estuvo unos días en el templo. En la actualidad está en posesión de quien lo cedió.
SegÚn distintas fuentes, la relación de Gómez Mata con la Junta de San Pascual no es buena debido a la negativa del órgano rector de la basílica a la pretensión de Mata de que su esposa, fallecida este año, recibiera sepultura en el recinto religioso.
El obispo, Juan Antonio Reig Pla, ha optado por mantenerse al margen y señaló que lo importante es que la basílica del patrono sea un foco clave de religiosidad. Tampoco se han pronunciado representantes municipales.
Todo ello coincide con las denuncias sobre amenazas de las que han sido objeto distintos integrantes de la Junta Económica de San Pascual, como ya publicó este diario.
El ahora carillón silencioso de San Pascual en Vila-real es el mayor de España y uno de los más grandes de Europa, ya que está formado por 72 campanas cuando lo más habitual es que tengan una veintena. En las obras relacionadas con el carillón, las campanas y otras mejoras, el empresario Gómez Mata ha invertido aproximadamente unos ciento cincuenta millones de pesetas.
Entre las campanas se encuentra la mayor del mundo de volteo, de más de tres toneladas. En el carillón tenían lugar dos veces al mes numerosos conciertos que tampoco pueden escucharse en la actualidad.
Además, han quedado paralizados proyectos importantes que tenía previstos el empresario para ampliar y mejorar la basílica hacia la calle Ignasi Vergara.
Entre las mejoras previstas se encontraba también la renovación del actual pavimento y la mejora de los laterales del interior de la basílica, así como la construcción de nuevas cÚpulas.
La tirantez existente en torno al recinto religioso de San Pascual Bailón puede perjudicar las obras previstas en la basílica.
La mala relación entre José Gómez y la Junta de Obras de San Pascual ya fue anunciada y constatada y, de hecho, en su día el empresario local ya anunció su total desvinculación con la institución religiosa. Mientrastanto las obras de mejora del edificio pueden verse afectadas.
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