Con motivo del 450 Aniversario de la Parroquia de Sax, la comisión de fiestas propuso a los Campaners de la Catedral de València realizar un concierto de campanas en la torre, coincidiendo con la tarde de la jornada central de la fiesta de la Virgen de los Frutos, patrona de la población.
Media hora antes de la procesión comenzaron los tres toques de aviso de procesión, consistentes en el volteo de la campana mayor, acompañado del repique de las menores. En el momento de la salida de la imagen de la Virgen se realizó un largo volteo general, seguido de variadas combinaciones de volteos en diversos momentos del recorrido de la procesión.
El concierto en sentido estricto se realizó caída ya la noche, cuando llegó la procesión a la plaza, momento en que se repartieron los programas entre los asistentes a la plaza, en el centro de la cual fue colocada la imagen de la Virgen, que en cierto modo presidió el acto. Cabe destacar que imágenes en directo desde la sala de campanas fueron además proyectadas en el muro lateral de la iglesia, para la mejor comprensión de las técnicas de toque por parte de los asistentes.
5 fueron los campaneros encargados de llevar a cabo el concierto, y a pesar de la incómoda e inadecuada instalación que presentan las campanas, con yugos de hierro y mecanizadas con motores continuos, el interés por participar en este concierto era doble para los Campaners de la Catedral de València debido al desconocimiento previo de estas campanas, al no figurar el inventario general de campanas de la Comunitat Valenciana.
El campanario de Sax data de finales del siglo XVI o principios del XVII, si bien el pináculo y la barandilla de hierro lo rematan desde 1878 tal y como hoy en día se conoce. Actualmente alberga 4 campanas, una del siglo XIX y las otras tres refundidas en el siglo XIX:
-La pequeña (sur): “María de la Asunción Sanjuán. Siendo cura Matías Garrigós. Año 1886”
-Santa Eulalia (este): “Santa Eulalia. Año 1885. Refundida en el año 1973. Fundición Salvador Manclús. Valencia”
-San Joaquín (norte): “San Joaquín 1963. Siendo cura D. Jerónimo Márquez Penalva”
-Asunción (oeste): “María de la Asunción. Año 1861. Refundida en 1973”
En primer lugar se realizarán los toques de procesión (aviso y acompañamiento durante la salida y la entrada. Al acabar la procesión se realizará el concierto propiamente, combinando los repiques en la primera parte y los volteos en la segunda:
Los CAMPANERS DE LA CATEDRAL DE VALÈNCIA son los encargados desde 1988 del toque de las campanas de la catedral, de su mantenimiento y su difusión. Entre otras actividades, a parte de los toques a lo largo del año litúrgico, disponen de una página Web que difunde numerosos informaciones en torno a las campanas: inventarios, fotografías, informes, artículos, grabaciones de vídeo o de sonido (MP3)
Los CAMPANERS DE LA CATEDRAL DE VALÈNCIA forman parte del GREMI DE CAMPANERS VALENCIANS, una asociación cultural, fundada en 1989, y dedicada a recuperar la tradición de tocar las campanas manualmente. Sus miembros, más de 220, tocan actualmente en las catedrales valencianas de Segorbe y València y en otros campanarios como Alaquàs, Albaida, Bocairent, Castelló, Caudete, Cheste, Eslida, Jérica, L’Alqueria de la Comtessa, Massanassa, Moixent, Nules, Ontinyent, Otos, Petrés, Quesa, Sagunt, Sagra, Soneja o Vila-real.
Aparte de la actividad sonora, los asociados se dedican al estudio, la investigación, la conservación y el seguimiento de las restauraciones. Se trata de conocer, utilizar, conservar y difundir las peculiares características de un instrumento musical destinado a usos comunitarios. No olvidemos que las campanas, bien conservadas, suenan igual a lo largo de los siglos y son, por tanto, la más antigua música viva, la más alta y sonora vida comunitaria.
No estamos en contra de las mecanizaciones de campanas, pero deben hacerse siguiendo tres condiciones: conservar (o restaurar) las instalaciones originales, reproducir los toques tradicionales y no impedir los toques manuales. Se trata de considerar el conjunto (campanario, campanas, instalaciones y toques) como un único instrumento musical, que se debe conservar y mantener en uso, como un singular elemento patrimonial.
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