Trabajos de descarga de los bronces que han sido restauradas para volver a colocar en el campanario
Los cuatro bronces del campanario de la parroquia de Atzeneta d’Albaida serán colocadas de nuevo hoy, después de los trabajos de restauración y limpieza. Ayer fueron bendecidas por el párroco de la localidad, Javier Francés, tras la misa vespertina a la que asistieron numerosos fieles.
Esta iniciativa forma parte del proyecto global que contempla trabajos de reforma en todo el campanario. Entre las actuaciones realizadas en el campanario cabe destacar la sustitución de la parte eléctrica por un sistema más sofisticado para evitar las vibraciones que, con el tiempo, iban deteriorando la estructura del edificio.
Para la limpieza se han utilizado técnicas avanzadas que han consistido en la proyección de agua con arena y se han instalado motores de bandeo. También se han sustituido los electromazos y los yugos metálicos de las campanas por otros de madera de iroko.
El presupuesto global de la rehabilitación del edificio asciende a 163.500 euros, de los que la Diputación ha aportado 90.000. El coste de la restauración de las campanas ha ascendido a 33.500 euros, mientras la reforma del campanario y la fachada ha supuesto un desembolso de 110.000 euros. A estas cantidades hay que sumar la nuevas puertas del templo que también se cambiarán.
El proyecto de mejoras del templo ha contado con el respaldo de todos los vecinos que han contribuido desinteresadamente con aportaciones económicas personales. El Ayuntamiento también colaboró con el asesoramiento del arquitecto municipal.
En estos momentos y según manifestó el párroco, “todavía faltan unos 35.000 euros para cubrir todos los gastos, por lo que seguimos haciendo actividades y loterías”.
Las actuales campanas fueron realizadas en los años 60 por una fábrica local conocida como Fundación Roses, que en su tiempo abasteció muchos campanarios de municipios de la comarca.
Al acto de bendición acudieron muchos vecinos que no quisieron perderse este evento, ya que el campanario es un edificio emblemático y muy apreciado en la localidad que forma parte de su historia. Algunos curiosos también quisieron presenciar el momento de la descarga de las cuatro campanas conocidas con los nombres de la Gran, María dels Desamparats, Sant Josep y Tiple.
Una prueba del aprecio por las campanas fue que algunos vecinos quisieron fotografiarse junto a sus hijos con las campanas.
La lluvia desmereció un tanto el acto de bendición, aunque no evitó la presencia masiva de ciudadanos.
Recientemente un grupo de 50 personas representaron el musical Jesucristo Superstar en las instalaciones del polideportivo del municipio, cuya recaudación se destinó íntegramente a sufragar parte de los gastos de esta iniciativa.
Los actores fueron todos voluntarios que interpretaron los 23 temas de que consta el musical. La colaboración ciudadana y este tipo de actividades seguirán hasta saldar las cuentas de la restauración.
Raúl JORNET
"Las Provincias" (21-12-2005)
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