Amurrio recuerda formas olvidadas de hacer música en el IX concierto de campaneros al que ayer se sumó un juglar medieval
Las campanas sonaron por todo lo alto ayer en Amurrio - Autor: OIARZABAL, Araceli
El salón de actos del edificio de la Catequesis de Amurrio se convirtió al mediodía de ayer en el escenario del novedoso acto que iba a acompañar al IX concierto de campanas de esta villa ayalesa. Se trataba de la proyección del audiovisual Atxabaltan kanpaiek die. Unas jornadas sobre campanas que celebró, en octubre de 2011, el municipio guipuzcoano de Aretxabaleta, y que tuvo su plato fuerte en un concierto rural de campanas tocado, de forma sincronizada, desde las anteiglesias de Larrino, Korueta, Mendiola, Aratza y Arientza. Localidad, esta última, que tiene desde hace cinco años una escuela de campaneros que intenta enseñar este ancestral oficio para que no caiga en el olvido, y que ha editado un DVD didáctico para el aprendizaje del toque de campanas.
A los guipuzcoanos les tomó el relevo el músico e investigador del mundo folklorico, Kepa Pinedo, que ofreció una interesante charla -con demostraciones musicales incluidas- en torno al perfecto maridaje que puede resultar de los sonidos de flauta y campanas de pequeño tamaño, como bien sabían los músicos y trovadores del siglo XIII, tal y como quedó demostrado en los grabados medievales con los que Pinedo acompañó su intervención.
Ahí no terminaron las sorpresas, y es que a la salida, el juglar Rafael San Martín retrotrajo a los presentes 800 años en el tiempo interpretando la jocosa obra medieval, ambientada en tiempos de Cristo, La moralidad del ciego y el tullido. La presencia de este personaje, tocado por un sombrero de bufón con campanillas, en la novena edición del concierto de campanas de Amurrio se debió a una invitación de la asociación de campaneros local. Y es que, desde la primera cita de esta ya tradicional convocatoria -ideada para mostrar a la población los secretos de un sistema de comunicación ancestral que, con la llegada de las nuevas tecnologías, ha caído en el más puro ostracismo- los campaneros amurrioarras siempre se han esforzado por acompañar los toques tradicionales de las enormes tañedoras con actos distintivos e innovadores que, en la pasada edición, vino de la mano del espectáculo musical que ofrecieron los integrantes del dúo Hogei Hatz. Es decir, Ion Garmendia e Iñaki Plaza, que mostraron a los presentes cómo se pueden sacar notas de unos ingeniosos tubos de PVC o de una txalaparta de piedra, entre otras curiosidades. A las novedosas iniciativas de todos estos años se les sumó en 2010 la presentación del primer conjunto musical de cuernos antiguos del Valle de Ayala. Un grupo, fundado por Juan Antonio Alaña, de Menagarai, e integrado por siete jóvenes, que ayer volvió a tomar parte en la cita con las tañedoras amurrioarras, mediante un vistoso pasacalles.
Antes del inicio de estos actos, la asociación de campaneros -con 35 miembros, diez menores de 30 años- asistió a una misa, en la que se rindió homenaje a los compañeros fallecidos en los últimos años.
Tampoco faltaron en esta edición demostraciones de toques de llamada antiguos, tanto religiosos como civiles, como el de oración, el de ángelus o de los difuntos, así como el de sereno, que es cuando en los pueblos pequeños se avisaba a los vecinos para realizar tareas municipales, el toque de fuego para cuando había incendios, o el de tormenta, que realizaba el sacristán cuando avistaba una tronada con la intención de ahuyentar la tormenta.
La jornada se completó con una comida de hermandad con los campaneros venidos de Oiartzun, Aretxabaleta, Elburgo, Agurain, Puentedé, Burgos, Navarra...
OIARZABAL, Araceli
Noticias de Álava (23-09-2012)
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