Los grupos con representación en la Comisión de Cultura del Senado han aprobado una enmienda transaccional a la iniciativa de Compromís para declarar el toque de campanas tradicional como Bien de Interés Cultural Inmaterial.
Según ha informado el senador Carles Mulet, de Compromís, la Comisión de Cultura ha instado al Gobierno a iniciar de oficio el procedimiento regulado para la declaración de "El toque tradicional de campanas Bien de Interés Cultural Inmaterial", tanto en sus diferentes modalidades como su acomodación a los horarios tradicionales.
La petición ha sido aprobada con los votos de los grupos popular, socialista, Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, Esquerra Republicana, grupo vasco y Mixto.
En la misma iniciativa se propone que el Consejo del Patrimonio Histórico Español elabore y aprueba un Plan Estatal sobre protección de campanas y campanarios, supervisada por una comisión de expertos creada para tal fin.
Todas estas actuaciones se realizarán junto a las comunidades autónomas y con participación de la Administración Local, a través de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), a fin de declarar aquellas campanas y campanarios que merezca tal catalogación, como Bienes de Interés Cultural.
El senador Carles Mulet, promotor de la iniciativa ha recordado que la Ley del Ruido "se impone sobre el patrimonio sonoro, lo que acaba afectando a los campaneros, al patrimonio, a los toques y características de cada pueblo, autonomía y país".
El senador agradeció la ayuda y colaboración dels Campaners de la Catedral de València y els Campaners d'Albaida en la consecución de este acuerdo cultural.
La Asociación para la Defensa del Patrimonio Cultural, Hispania Nostra, Europa Nostra, Museo Internacional del Toque Manual de Campanas, Museu Internacional del Toc Manual de Campanes d'Albaida y Campaneros de Albaida han solicitado que todas las campanas de Europa que se hacen sonar manualmente toquen para inaugurar el año 2018, declarado como Año Europeo del Patrimonio Cultural.
Para Compromís, los toques de campanas son patrimonio y "deben de estar fuera de la consideración de ruido, para lo cual hay que redactar una normativa que regule su uso, basándose en documentos históricos de cada comunidad, región, pueblo o ciudad".
El senador territorial valenciano ha recordado que en los años 60 y 70 los campaneros sufrieron su mayor crisis con la falsa modernidad que electrificaba las campanas y apartaba a los campaneros. Con esto se perdía el gran patrimonio sonoro de España y se simplificaban los toques.
Albaida, con unos 3.200 toques de campana, es un ejemplo porque no ha perdido nunca el toque manual de campanas, ocho siglos de toque ininterrumpido y diario, un ejemplo de transmisión oral del patrimonio inmaterial de generación en generación.
EFE
La Vanguardia (12-06-2017)
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